Para responder a la pregunta de cuantas personas hay en la iglesia con una atracción al mismo sexo, primero nos toca echar una mirada breve a lo que dicen los últimos estudios acerca de la cantidad de personas que si identifican como “homosexual” o “bisexual” entre la población total.
Puede ser que hayas leído o escuchado la información errónea común reportada primero por Alfred Kinsey de que 10% de la población es homosexual o gay.[ii]. . . . Dos muestras distorsionadas son las más sorprendentes; primero, Kinsey incluyó en su muestra una proporción drásticamente alta de prisioneros de la cárcel. . . . En segundo lugar, (Kinsey) incluyo un porcentaje muy excesivo de miembros de organizaciones que promueven la vida homosexual.”[iv]
¿Entonces qué de la iglesia? Según el Doctor Thomas H. Olbricht, jubilado de la facultad y ex director del Departamento Bíblico del Colegio Seaver en la Universidad Pepperdine; la iglesia de Cristo tiene aproximadamente 3.500.000 miembros alrededor del mundo.[vi] Hablando como alguien que ha vivido con esto, la confusión y el sentimiento de culpabilidad son a veces demasiado abrumadores para soportar.
Estos seguidores de Jesús aman al Señor profundamente y son sus discípulos fieles. Sin embargo, la mayoría de estos hermanos y hermanas están demasiado aterrorizados para hablar abiertamente acerca de la batalla interna que les afecta diariamente porque los demás en su familia espiritual son completamente inconscientes, muy desinformados en cuanto al tema o sin la menor idea de cómo ayudar si alguien se les acerca para pedir consejos.
La persona con esta lucha personal sigue sufriendo en silencio mientras el aislamiento se multiplica porque tiene miedo también de que tendrá que soportar el mismo tipo de rechazo homofóbico que experimentaba fuera de la iglesia. Mientras el resto de los miembros de la congregación se mantienen en silencio porque ignoran el problema, o peor, siguen con las mismas actitudes homofóbicas que tenían antes de su conversión y membresía en la iglesia de Jesús.
Sería un buen momento para recordarnos las palabras de Pablo a los corintios en 2 Corintios 5:16: “Por eso, nosotros ya no pensamos de nadie según los criterios de este mundo; y aunque antes pensábamos de Cristo según tales criterios, ahora ya no pensamos así de él.”
Y mientras lo que sigue no es escritura, esta expresión inventada por el reformador inglés John Bradford es ciertamente útil para ayudarnos a tener en cuenta cuanto cada uno de nosotros hemos sido conmovidos por la mano misericordiosa de Dios y entonces extender esta misma generosidad los unos a los otros: “But for the grace of God, there goes I.” (“Pero por la gracia de Dios, ahí voy yo”)
Además, seamos realmente honestos los unos con los otros. ¿No es cierto que cada uno de nosotros tenemos nuestros propios problemas, defectos de carácter, retos, naturaleza pecaminosa y tentaciones que tenemos que superar en este lado del cielo? ¿Y no es justo afirmar también que muchos, muchos de nosotros (independientemente de nuestra orientación) mostramos nuestras diferentes áreas de “quebrantamiento” a través de la disfunción sexual? El “quebrantamiento” sexual es apenas exclusivo a los homosexuales o los con una atracción por el mismo sexo, y es simplemente una de las maneras más prevalentes y comunes que Satanás ha trabajado en nuestras vidas, en la sociedad en general, en su tentativa de alejarnos del Señor y traer confusión a nuestras vidas.
¿Entonces todos estos asuntos eran destinados a curarse en el momento que fuimos salvos? Perdonados sí, ¿pero todos curados? Se puede ganar mucho espiritualmente al afrontar estos retos con paciencia, consistencia y fe, mientras se apoya en Dios para tener fuerzas. Ninguno de nosotros salimos de las aguas del bautismo como una persona perfecta. Esto no era el plan de Dios. Más bien, Él quiere dedicar el resto de nuestras vidas al perfeccionarnos. (James 1:2-4)
Las personas en nuestras congregaciones que tienen una atracción por el mismo sexo han vivido la mayor parte de sus vidas expuestas a un bombardeo de chistes crueles y rechazo por sus familiares y amigos. Entonces, por favor, cuando descubres que uno de tus hermanos o una de tus hermanas era homosexual antes y sigue viviendo con atracciones indeseadas por el mismo sexo; considera las siguientes palabras inspiradas que Juan escribió en 1 Juan 4:18: “Donde hay amor no hay miedo. Al contrario, el amor perfecto echa fuera el miedo, pues el miedo supone el castigo. Por eso, si alguien tiene miedo, es que no ha llegado a amar perfectamente.”
Supongo que la pregunta apropiada no es cuantas personas en nuestras iglesias tienen una atracción por el mismo sexo, que sea 3%, 10% o 50%, realmente no importa. La pregunta apropiada es: ¿cuantas personas en nuestras iglesias son pecadoras y necesitan el perdón para estar un día en el cielo? Este número seria 100%, y eso iguala la situación, ¿no es cierto?
[ii] Estudio adicional de este tema se puede leer en Kinsey, Sex and Fraud: The Indoctrination of a People por Judith A. Reisman y Edward W. Eichel. (Layfayette, La: Huntington House, 1990)
[iv] Gary Gates, "Interview with Gary Gates of the Williams Institute," About.Com, Ramone Johnson, Entrevista; Gary Gates del Williams Institute sobre la ley asociada con la orientación sexual y la política pública de UCLA, 2008 <http://www.gaylife.about.com> .
[vi] Yarhouse, Mark A., y Lori A. Burkett. Sexual Identity a Guide to Living in the Time Between the Times. Lanham, Md: University P of America, 2003. 3.